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A
consecuencia de las medidas sanitarias para evitar la propagación de
coronavirus más de 6 mil comercios formales se mantienen cerrados, con
dificultades para poder sobrevivir, pues sus gastos siguen corriendo y no tiene ingresos, señaló el presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y
Turismo (Canaco), Marco Antonio Prósperi Calderón.
En
entrevista, reprochó que mientras los negocios establecidos acatan las medidas
de cierre y sana distancia para evitar contagios de la enfermedad, vendedores
ambulantes siguen en las calles de la capital poblana sin respetar las
recomendaciones sanitarias.
Comentó
que en una reunión con autoridades de Protección Civil estatal se dijo que el
comercio establecido en el primer cuadro de la ciudad respondió al decreto
sobre actividades no esenciales; sin embargo, en la zona norponiente del centro
histórico de la capital poblana , donde operan negocios de pescados y mariscos, “parece que no pasa
nada y están los ambulantes cerrando calles para vender y no se vale, porque
entonces no hay un esfuerzo parejo”.
Los gastos siguen corriendo para los negocios formales, pese a que están cerrados y no tienen ingresos, como las rentas, luz agua potable, impuestos, pago cuotas patronales y salarios a los trabajadores.
La reserva y fondos de ahorro de los comerciantes están por agotarse, por
lo que no descartó que algunos recurran a un crédito
bancario, aunque por la complicada situación económica en que se encuentran
deberán ser cuidadosos y tomarlo con cautela.
“Hemos
sido disciplinados y acatado la recomendación de la autoridad y dar prioridad
al tema de salud, algunos están completando tres semanas de cierre y se están
agotando los recursos; no hay flujo de efectivo y nuestros compromisos y gastos
siguen corriendo”.
El empresario
explicó que, de 7 mil 600 socios de la Canaco, cerca del 80 por ciento están
cerrados, y los que continúan abiertos tienen actividades esenciales como es el
caso de farmacias, tiendas de alimentos, bancos, gasolineras, consultorios.
“Creo
que, a finales de este mes, muchos de los negocios van a entrar a una situación
muy crítica. Ahorita los bancos están apoyando no pagar cuatro meses, pero
después hay que pagarlo con intereses, entonces, empresas, sobre todo micros y
pequeñas que no van a aguantar”, concluyó Prósperi
Calderón.
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