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Con el
propósito de contrarrestar los asaltos a los clientes de bancos y en general
combatir la delincuencia, el gobierno del estado de Puebla y las instituciones
bancarias aplicarán una serie de medidas y coordinarán sus actividades de
respuesta para combatir la delincuencia.
Durante
una reunión encabezada por el gobernador Miguel Barbosa, el fiscal general del
estado, Gilberto Higuera Bernal, los directivos de las diversas instituciones
bancarias externaron su disposición de llevar a cabo un trabajo coordinado con
la autoridad estatal y garantizar la seguridad en beneficio de los poblanos.
En
Puebla van al alza los asaltos a cuentahabientes, afuera de las sucursales, pues
tan solo en los primeros cinco meses de este 2022 ya van 56 robos; mientras que
en 2020 hubo un total de 69 incidentes y en 2021 fueron registraron 77 asaltos,
cuyas cantidades van desde los 100 mil hasta los 900 mil pesos.
Las ciudades
donde más se registra este tipo de delitos son Puebla capital, Tehuacán,
Teziutlán, Tecamachalco, Izúcar y Tepeaca, según datos de la Secretaría de
Seguridad Pública.
Al
respecto, Verónica Castellanos, directora ejecutiva regional de banca para empresas
e instituciones de Santander, afirmó que “en Puebla las bandas (de asaltantes) van
en aumento”, por el robo de los cajeros (todo el equipo), la colocación de
dispositivos para robar al usuario y también por el asalto a los
cuentahabientes cuando retiran dinero en efectivo de la sucursal.
Los representantes
de instituciones como BBVA, HSBC; Banorte, ScotiaBank, Santander, CityBanamex,
coincidieron en señalar que la política en todas sus sucursales es que ningún
cajero o cajera puede tener su celular, es decir todo el día el aparato está en
resguardo mientras trabajan; además, aplican “perfil de confianza” a las
personas que contratan, y aplican diversos protocolos para prevenir cualquier
incidente dentro de las instalaciones
Sin
embargo, plantearon su disposición de coordinarse con el gobierno en llevar a
cabo un plan para reforzar la seguridad dentro y fuera de las sucursales y de
los cajeros automáticos, aunado a reforzar sus lineamientos internos de
operación y del personal.
De
inicio, tanto gobierno como los bancos analizarán los puntos adecuados para
instalar un mayor número de cámaras de vigilancia dentro y fuera de las instalaciones;
reforzarán operativos de vigilancia fuera de los bancos; realizarán una campaña
de orientación a la población sobre qué medidas de seguridad adoptar cuando
acuda a la sucursal o al cajero; además que los ciudadanos opten por la banca
móvil para cualquier operación, pues es más fácil, rápida y segura.
Aunado
a que, los respectivos departamentos de seguridad de cada banco sostendrán
reuniones de trabajo con la Secretaría de Seguridad Pública y con la Fiscalía
General para que evalúen y propongan las acciones que pueden tomarse para
contrarrestar la delincuencia, pues ambas áreas “hablarán el mismo idioma”,
como señaló uno de los directivos bancarios
Barbosa
dijo a los directivos de las instituciones financieras que la seguridad pública
es prioridad; en Puebla, en general, las actividades comerciales pueden
realizarse con tranquilidad, ya que en la ciudad o en otras partes del estado “no
hay zonas dominadas por el crimen (…) ni tampoco hay pago por derecho de piso”.
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